Rafael Arístides Aguiluz, alias “Blacky”, palabrero de la pandilla 18, ha sido condenado a 40 años de prisión por ser uno de los líderes de esta estructura terrorista. La sentencia fue dictada por la jueza del Tribunal Segundo contra el Crimen Organizado de San Salvador, tras acusarlo de agrupaciones ilícitas, cargo reformado por la Asamblea Legislativa tras la entrada en vigencia del régimen de excepción el 27 de marzo de 2022.
La reforma legal establece que los cabecillas, financistas y fundadores de pandillas deben enfrentar penas de entre 40 y 60 años de cárcel. Aguiluz fue arrestado por agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) el 1 de abril de 2022, solo cinco días después de que comenzara el régimen de excepción.
Durante el juicio, especialistas en análisis de tatuajes confirmaron que Aguiluz portaba numerosos tatuajes relacionados con la clica Sombras del Parque Locos Sureños, perteneciente a la pandilla 18, en la que ostentaba el rango de palabrero. Los residentes de la urbanización Alta Vista lo identificaron como el jefe de los pandilleros de la zona.
La jueza fundamentó su decisión en las pruebas presentadas por la PNC, así como en los análisis periciales y testimonios que demostraron su liderazgo dentro de la estructura criminal.