La rehabilitación de los privados de libertad, que no pertenecen a pandillas, es una realidad en los centros penitenciarios de El Salvador. Estos reos no solo aprenden oficios para su reintegración a la vida laboral, sino que también adquieren valores cívicos y morales mediante la música.
El director de Centros Penales, Osiris Luna, destacó cómo en el Nuevo Sistema Penitenciario se inculca el respeto a los símbolos patrios, como lo mostró la Orquesta Sinfónica del Plan Cero Ocio integrada por reos del Centro de Formación Laboral La Esperanza. En un video compartido, los privados de libertad interpretan el Himno Nacional frente a miles de internos del sector nueve del Penal La Esperanza, conocido como Mariona.
Además de los actos cívicos, como el realizado el 16 de septiembre con banderas y bailes típicos, los reos en fase de confianza llevan alegría a comunidades. Un ejemplo fue el pasado 21 de septiembre, cuando animaron la celebración de 15 años de la comunidad Monseñor Romero, en San Martín, con un repertorio de cumbia, salsa, merengue y bachata.
Aparte de la música, los privados de libertad también apoyan en jornadas de fumigación para combatir el dengue en colonias de Ciudad Delgado y Soyapango, como parte del Plan Cero Ocio. Asimismo, el pasado 15 de septiembre, 300 reos participaron en labores de limpieza tras el desfile cívico, recogiendo basura acumulada en calles y aceras.
