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El color azul de la bandera salvadoreña iluminó las calles en el desfile cívico de la Banda El Salvador, un proyecto musical dirigido a niños y jóvenes de todo el país. Esta banda, coordinada por el Ministerio de Cultura a través del Sistema de Coros y Orquestas Juveniles, tiene como objetivo convertirse en un referente de la música de marcha en El Salvador y América Latina.
Conformada por 300 niños y jóvenes de entre 10 y 25 años de edad, dirigidos por el maestro David Pimentel y un equipo de 24 instructores, la Banda El Salvador se considera la banda más grande de su tipo en El Salvador y posiblemente en toda América Latina.
Lo más notable de esta banda son las historias personales de sus miembros, que reflejan esfuerzo y superación. Muchos de ellos comenzaron tocando instrumentos prestados o comprados de segunda mano, algunos crecieron en entornos desafiantes y otros provienen de lugares de difícil acceso. Sin embargo, todos comparten una pasión por la música y ahora tienen la oportunidad de realizar sus sueños gracias a la Banda El Salvador.
La música ha demostrado ser una fuerza transformadora en la vida de estos jóvenes. Además de proporcionarles habilidades musicales, la banda les ha brindado un sentido de comunidad y empoderamiento. La música se ha convertido en una motivación para muchos de ellos y les ha abierto nuevas perspectivas y oportunidades.
El director musical, David Pimentel, señala que la música tiene el poder de cambiar vidas y que muchos de estos jóvenes podrían convertirse en futuros maestros y líderes en el proyecto. La Banda El Salvador no es solo una oportunidad para aprender música, sino también un camino hacia un futuro más brillante y prometedor.
Este proyecto se originó a principios de 2021 con audiciones abiertas que atrajeron a miles de jóvenes de todo el país. Los 300 seleccionados forman parte de un proyecto en crecimiento que continuará convocando a nuevos talentos.
La Banda El Salvador no solo enriquece la vida de sus miembros, sino que también tiene como objetivo acompañar y promover el patriotismo en la población a través de sus actuaciones en eventos cívicos y culturales. Esta iniciativa demuestra cómo la música puede ser una fuerza positiva y transformadora en la vida de los jóvenes y en la sociedad en general.
