Redacción |
En una tarde caótica del viernes, una violenta tormenta acompañada de ráfagas de viento tipo tornado golpeó severamente varios sectores de San Salvador, dejando una estela de destrucción que requirió la intervención urgente de miembros de Protección Civil. Las zonas más afectadas, especialmente la 29 calle Poniente y 7ª avenida Norte, se convirtieron en testigos de la furia desatada por esta inusual tormenta.
Las imágenes capturadas por Francisco Campos, reportero de Diario El Salvador, muestran cómo los escombros de negocios destrozados, vallas publicitarias arrancadas y el tendido eléctrico dañado se convirtieron en una visión desoladora. Uno de los momentos más peligrosos ocurrió cerca del redondel José Martí y la 5 avenida Norte, donde un árbol de laurel de la India se precipitó bloqueando por completo el paso vehicular.
El informe oficial de las autoridades confirmó los estragos causados por la tormenta, con un total de 15 árboles caídos y tres vallas publicitarias derrumbadas. Asimismo, se registraron daños en 35 viviendas y en la infraestructura del techo del Centro Escolar Domingo Savio. Afortunadamente, no hubo reportes de personas lesionadas, aunque los daños materiales fueron considerables, incluyendo pérdidas en una gasolinera cercana.
No es la primera vez que esta zona enfrenta un fenómeno de tal magnitud. El año pasado, fuertes vientos ya habían arrancado la corona de la virgen en la parroquia María Auxiliadora, conocida como Don Rúa, lo que sugiere la recurrente vulnerabilidad ante eventos climáticos extremos.
Además de San Salvador, otras áreas también sufrieron los embates de las lluvias. Protección Civil informó sobre tres viviendas dañadas en Mejicanos, un árbol caído y once viviendas inundadas en Soyapango, y en La Paz, dos muros colapsados y tres viviendas inundadas. San Miguel también sufrió con la caída de dos árboles debido a la intensidad de la tormenta.
Las labores de recuperación y limpieza comenzaron de inmediato, y se espera que las comunidades afectadas puedan superar rápidamente esta adversidad climática que ha dejado una profunda huella en la ciudad.
