El Gobierno del Presidente Nayib Bukele ha entregado a los residentes de Concepción de Ataco, en Ahuachapán Centro, la primera fase del revitalizado Centro Histórico, marcando la quinta obra de este tipo realizada por la Dirección de Obras Municipales a nivel nacional.
Esta impresionante obra ha transformado por completo el corazón del distrito, revitalizando el parque central y la histórica iglesia Inmaculada Concepción de María.
Durante la primera fase del proyecto, se ha renovado por completo la apariencia del parque central. El piso ha sido reconstruido utilizando lajas y concreto coloreado, al igual que el quiosco y la fuente. Además, se han añadido nuevas bancas rodeadas de vegetación, incluyendo arbustos, árboles y flores. La iluminación, ahora con tecnología LED, resalta aún más la belleza del parque, cubriendo tanto el perímetro como el quiosco, la fuente y la fachada de la iglesia.
Una adición destacada ha sido la creación de un área de juegos para niños, brindando un espacio más amplio para que las familias disfruten.
Esta renovación ha beneficiado a una población de más de 12,700 habitantes, especialmente en áreas rurales como El Arco, El Naranjito, El Tronconal, La Ceiba, La Joya de Los Apantes, Los Tablones, San José, Shucutitán y Chirizo, entre otros.
Pero el trabajo continúa, con la segunda fase que incluirá la instalación de cableado subterráneo para electricidad, teléfono y televisión por cable. Además, se planea reconstruir las calles céntricas del distrito con piedra cuarta, como la 3ª calle Oriente, la 3ª calle Poniente, la calle Julián Izarparte, la 2ª calle Oriente y la avenida Fray Celestino.
Con esta renovación, el Gobierno refuerza la Ruta de Las Flores, uno de los principales destinos turísticos de El Salvador, abriendo nuevas oportunidades laborales y revitalizando la economía local.
Otros centros históricos recientemente entregados en la zona occidental del país incluyen Juayúa en Sonsonate y Apaneca en Ahuachapán. Además, se ha revitalizado la plaza memorial del caserío El Mozote en Meanguera, Morazán, así como el sitio colonial de Suchitoto en Cuscatlán.
Para aprovechar estos nuevos espacios públicos y fortalecer la identidad cultural de los pueblos, el Gobierno organiza festivales culturales los fines de semana, con la participación de grupos folclóricos y la banda de música militar de la Marina Nacional.
Esta iniciativa no solo embellece los espacios públicos y fomenta el turismo, sino que también preserva la historia y la cultura de los pueblos para las generaciones presentes y futuras. Es una prueba más del compromiso del Gobierno de construir un nuevo El Salvador y de que el dinero rinde cuando nadie lo malversa.